Publicado: 21/11/22 13:37 Categorías: Microbiología

 

Actualmente, las salas blancas son un elemento fundamental en numerosos procesos de producción e investigación. Y en los últimos años, se ha incrementado considerablemente el número de estas instalaciones más allá del ámbito hospitalario en lugares como laboratorios farmacéuticos, de reproducción asistida, bancos de sangre y de tejidos. 

 

Las salas blancas son el gran aliado de la industria

 

El término se encuentra definido en la norma UNE EN ISO 171340 como “sala con las estructuras e instalaciones específicas para controlar la contaminación y los parámetros ambientales adecuados”. Por otro lado, es común encontrar otra terminología similar, la de “entornos limpios controlados”. Estos últimos se encuentran definidos en la norma UNE-EN 17141:2021 como “zona definida en la cual la contaminación microbiológica se controla con medios específicos”, lo cual engloba a su vez el concepto de sala blanca.  

 

El control de las condiciones asépticas es fundamental en este tipo de instalaciones

 

En definitiva, una sala blanca o limpia es un área diseñada para trabajar en condiciones de asepsia y prevenir la contaminación de materiales estériles, componentes y superficies asépticas. 

 

En estas instalaciones se controlan gran cantidad de parámetros, como la concentración de partículas en el aire, la temperatura, humedad, presión, etc. Todo ello, con el fin de crear un entorno de trabajo óptimo que minimice al máximo el riesgo de contaminación. 

 

Control microbiológico de las salas blancas

 

Todas las instalaciones que cuentan con salas blancas deben implantar un plan de control ambiental, que permita evaluar y controlar el riesgo de contaminación microbiológica y que garantice la eficacia de las medidas de higiene y seguridad implantadas.  

 

Su control microbiológico se basa fundamentalmente en dos controles, el control del aire y el control de superficies. 

 

Equipo de control de calidad del aire de microbiología
 

Para el control de aire, existen sistemas mecánicos de muestreo de aire, que aspiran volúmenes de aire constantes durante un tiempo determinado. En estos sistemas se colocan placas petri de 90 mm de diámetro para recoger las partículas que hayan sido aspiradas. Por otro lado, en lugares de difícil acceso o de espacio reducido, se realiza la sedimentación en placa. Este método consiste en la exposición de una placa petri al aire durante un tiempo determinado (1 – 4 horas) en el cual, se recogen en la placa aquellas partículas que se encuentran suspendidas en el aire y que hayan ido precipitando sobre la superficie del agar. 

  

Desde Condalab, presentamos la nueva gama Lateral Code (LC), compuesta de placas de sedimentación con etiquetado lateral, especialmente diseñadas para el control microbiológico en la industria farmacéutica.  

 

El otro control microbiológico fundamental en las salas blancas es el control de superficies. Para este tipo de muestreo, la Norma UNE-EN 17141:2021 recomienda el uso de placas de contacto tipo Rodac. Estas placas tienen un diámetro más reducido (55mm) que las placas petri de sedimentación. 

 

Un problema típico en la toma de muestras en superficies es la apertura de las placas rodac tras su utilización, provocando contaminaciones y alterando los resultados de los muestreos.  

 

Sin embargo, en Condalab tenemos la solución a este problema. Las nuevas placas Lock&Block, contienen un sofisticado sistema de bloqueo que permite el cierre y bloqueo de las placas tras el muestreo para un transporte seguro hasta el laboratorio donde serán incubadas y analizadas. Además, el sistema de bloqueo cuenta con una posición de incubado, que permite el intercambio de gases, para una incubación aeróbica adecuada. 

 

Nuevas placas Lock&Block 

 

Si deseas conocer más sobre las placas Lateral Code y Lock&Block, encuentra toda la información sobre la gama en nuestra web.