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Publicado: 23/09/20 12:38 Categorías: Microbiología
Uno de los parámetros más analizados en aguas de consumo es el indicador Escherichia coli / coliformes. Pero, ¿para qué queremos enumerar estos microorganismos en nuestras aguas embotelladas?
Pues la respuesta es sencilla e ingeniosa. El objetivo de analizar estos parámetros en aguas de consumo se basa en utilizar la presencia de este grupo de microorganismos para conocer la potencial patogenicidad presente en la muestra. Sería materialmente imposible analizar microorganismo a microorganismo, por lo que se opta por identificar y enumerar el grupo de coliformes.
¿Pero qué información nos aporta el número de coliformes?
Los coliformes son bacterias ubicuas en el ambiente, ya sea acuático, suelo o vegetación. Pero también se encuentran presentes, en muy grandes cantidades, en las heces de animales de sangre caliente.
Si a esto sumamos que, los coliformes normalmente no causan graves enfermedades y son fáciles de cultivar, su presencia y número puede utilizarse como un indicador de la presencia de potenciales organismos patógenos de origen fecal que puedan estar presentes en la muestra.
¿Y qué sentido tiene entonces analizar Escherichia coli?
En protocolos y análisis anteriores, no se incluía la enumeración de esta bacteria. Simplemente, se hacía una relación de coliformes totales y fecales. Pero hoy en día sí que es necesario, y así lo marca la regulación, analizar la presencia de E. coli en aguas de consumo. Esto es así porque, aparte de que puedan encontrarse algunas cepas patógenas dentro de esta especie, Escherichia coli es una bacteria perteneciente al grupo de coliformes fecales. Además, debido a su limitada supervivencia en ambientes no entéricos, su presencia indicaría un origen reciente de la contaminación, pudiendo desarrollar planes de actuación más eficientes.
CondaChrome® CCA: una solución al alcance de todos.
Nuestro agar CondaChrome® CCA está compuesto por sustratos cromogénicos que ponen de manifiesto la presencia de coliformes y Escherichia coli diferenciándolos en la pigmentación que presentan las distintas colonias.
La enzima β-D-Galactosidasa es activa en el grupo de los coliformes, por lo que su presencia, al degradar el sustrato cromogénico presente en el medio, genera colonias de color rosado. Escherichia coli, presenta además la enzima β-D-Glucoronidasa (que no está presente en el resto de coliformes), por lo que las colonias crecerán de un color azul oscuro o violeta debido a la acción conjunta de ambas actividades enzimáticas específicas.
Nuestro medio CondaChrome® CCA está formulado acorde a ISO 9308-1:2004, para la enumeración de Escherichia coli y Coliformes, por lo que su no encontrará problemas a la hora de incorporarlo en caso de tener tu método acreditado.
Si necesitas ampliar la información sobre la implantación del método o sobre el uso de nuestro producto, no dudes en contactar con nosotros.