Publicado: 23/08/22 13:18 Categorías: Microbiología

 

Es verano y con ello el consumo de agua aumenta considerablemente como principal fuente de hidratación para evitar los peligrosos golpes de calor. Es por ello, y de vital importancia, que la población tenga acceso a aguas aptas para consumo que estén libres de contaminantes para evitar enfermedades gastrointestinales o sistémicas. 

 

Patógenos analizados en aguas para consumo 

 

Los principales patógenos asociados a aguas son bacterias como Legionella, Salmonella, Escherichia coli, y algunos virus y protozoarios. La gran mayoría de estos contaminantes provienen de materia fecal, aunque es cierto que algunos son propios de la fuente y/o del ambiente. 

 

Debido a la gran variedad de microorganismos que pueden estar presentes, es complicado realizar análisis individuales de cada uno, especialmente cuando la gran mayoría se eliminan con los sistemas de depuración/limpieza. Es por esta razón que para las aguas destinadas al consumo se monitorean utilizando ciertos indicadores microbianos para asegurar la calidad de las mismas. 

 

Los grupos de indicadores que se utilizan son los fecales como bacterias coliformes. Actualmente en la UE, la Directiva 2020/2184 indica los parámetros a analizar: 

  

 

Parámetros microbiológicos, indicadores y operativos 

Valor paramétrico 

(UFC/100 ml o 250 ml1) 

Escherichia coli 

0 

Enterococos 

0 

2Clostridium perfringens (incluidas las esporas) 

0 

Recuento de colonias a 22ºC  

Sin cambios anómalos 

Bacterias coliformes 

0 

3Colífagos somáticos 

50 

1 Para agua envasada  

2 Si la evaluación de riesgos indica conveniente hacerlo 

3 Agua sin tratar 

 

E. coli-coliformes, Enterococos y Legionella son parámetros que es común encontrarlos en el análisis de aguas de consumo, sin embargo, ¿qué pasa con Clostridium perfringens? 

 

Clostridium perfringens: patógeno oportunista 

 

Este microorganismo es de particular interés, ya que habita comúnmente en forma de células vegetativas y esporas que son resistentes, por lo que pueden sobrevivir largos periodos, e incluso más que otros indicadores fecales, en cuerpos de aguas contaminados. Y al igual que otros indicadores, su existencia pone sobre aviso de la posible existencia de otros microorganismos como Cryptosporidium. 

 

Estas esporas son estructuras que difícilmente se pueden eliminar completamente con los procesos habituales de desinfección, y en parte es por ello que se han convertido en una valiosa bacteria en la evaluación de los tratamientos de aguas para consumo 

 

Medios de cultivo para el análisis de Clostridium perfringens 

 

Agar TSC: colonias de C. perfringens de color negro 

  

El análisis de este patógeno de acuerdo a la ISO 14189:2013 comienza con un pre-tratamiento térmico antes de la filtración en la membrana para retener las esporas presentes en la muestra. Los medios a utilizar son el TSC, un medio selectivo con cicloserina que se encarga de inhibir flora acompañante como Bacillus y otros anaerobios facultativos que puedan interferir. 

 
Asimismo, C. perfringens reaccionará con los indicadores de ácido sulfhídrico para producir la coloración típica de colonias negras, grisáceas o marrones. 

 
Para la confirmación de las colonias sospechosas se utiliza el Agar Columbia y la prueba de la fosfatasa ácida. 

 

Si tienes alguna duda sobre el análisis de Clostridium perfringens en muestras de aguas, no dudes en contactarnos.